En las últimas horas el siempre activo leaker Ice Universe compartió algunos (presuntos, claro) detalles sobre las cámaras de la próxima generación de Galaxy S, y parece que no hay mucho por qué emocionarse. Las novedades son mínimas y en algunos casos incluso se habla de retrocesos respecto a la generación actual.
Ya ayer comentábamos que Samsung debería usar el mismo sensor para la tele periscópica 5X —exclusiva de los modelos Ultra— por al menos otros dos años, y estas nuevas filtraciones refuerzan aún más la idea de que el gigante surcoreano está adoptando un enfoque mucho más cauteloso y medido que en el pasado, sobre todo en el apartado fotográfico, aunque no únicamente ahí.
En concreto, “Ice” dice que el modelo base de la familia Galaxy S26, que con toda probabilidad se llamará S26 Pro, debería adoptar un nuevo sensor para la cámara principal, siempre de 50 MP; lo cual sería una buena noticia, si no fuera porque en realidad las dimensiones físicas del sensor se mantendrán prácticamente idénticas. La resolución y el tamaño son factores clave que determinan la calidad de una foto, lo que hace pensar que respecto a los actuales S25 las imágenes serán más o menos iguales.
La unidad ultra gran angular pasará de 12 MP a 50 MP, lo cual suena excelente, al menos en papel; solo que en realidad el sensor será bastante económico y compacto, y difícilmente representará una mejora significativa en la calidad de las fotos. El sensor del tele se mantendrá en 10 MP, que, señala la fuente, es de las resoluciones más bajas en todo el sector.
Si acaso, como ya había surgido hace algunas semanas, el sensor tele 3x “cercano” que encontraremos en S26 Ultra podría ser el mismo que vimos en S25 Ultra (un ISOCELL HP2 de 200 MP), pero con una apertura más amplia, pasando de f/1.7 a f/1.4. La fuente añade además que el S26 Ultra debería traer nuevas “sorpresas” en el apartado de la pantalla, aprovechando algunas tecnologías clave desarrolladas por Samsung en ese sector; por ahora la información sigue siendo bastante vaga y críptica, y entender de qué se trata es prácticamente imposible.
En conjunto, la adición de la nomenclatura “Pro” al modelo base del S26 parece más un upgrade de nombre que de hecho. Naturalmente, todo esto son filtraciones que deben tomarse con la debida cautela, pero la fuente suele ser bastante confiable cuando se trata de Samsung.